7 reglas de oro para elaborar un CV tecnológico
El mercado laboral de las tecnologías de la información (TI) es extremadamente competitivo y volátil, en constante cambio. Para asegurarse un puesto en los procesos de selección y poder elegir la oportunidad adecuada en el momento oportuno de nuestra carrera, es esencial tener un CV relevante que pueda crear impacto.
Tener un currículum vitae (CV) actualizado nos da algunas ventajas competitivas:
1) aumenta las posibilidades de destacar sobre otros candidatos y ser elegido para ir a la entrevista; 2 ) agiliza el proceso de contratación y lo hace más transparente y relevante; 3) promueve nuestra marca personal como profesionales.
En este documento, hablamos de las 7 reglas de oro que hay que tener en cuenta a la hora de crear un CV que destaque en el mercado de las TI.
7 reglas de oro para crear un CV informático impactante
1. elija una plantilla sencilla
Puede parecer algo superficial, pero la elección de la plantilla de nuestro CV puede influir, a primera vista, en la atención que le prestan los reclutadores. Incluso puede cambiar toda nuestra percepción del candidato.
Así pues, hay que centrarse en la legibilidad y comprensibilidad de la información que queremos transmitir. Esto significa que, idealmente, deberíamos elegir una plantilla lo más limpia y moderna posible, que nos permita organizar la información de forma que sea fácil de encontrar y leer.
2. Prestar atención a la redacción y a la gramática
Lo ideal es escribir frases cortas y directas en un lenguaje sencillo y accesible para cualquiera. «Una frase, una idea» es el lema a seguir. Aliados de la sencillez de la redacción, encontramos una puntuación correcta y una gramática intachable. Todo esto es crucial para crear un CV relevante e impactante.
3. Estructuración ordenada del plan de estudios
La forma en que organizamos y estructuramos el CV es importante. Hay varias prácticas comunes que podemos adoptar para estructurar nuestro plan de estudios de forma ordenada.
Por ejemplo: el CV puede organizarse por secciones (Experiencia laboral; Educación y formación; Habilidades técnicas y sociales; Conocimientos lingüísticos, etc.).
En secciones como experiencia laboral y formación, organizar las actividades de la más reciente a la más antigua ayuda al reclutador a leer el CV empezando por la información más actual y/o relevante.
Escribir una breve descripción profesional sobre quiénes somos al principio del CV o enumerar las principales habilidades técnicas mediante viñetas también puede ser útil para mejorar la experiencia del lector y captar su atención.
4. Incluir información personal
Por supuesto, introducir los datos de contacto (como el correo electrónico y el teléfono móvil) es esencial, pero hay otros detalles que también son relevantes. Por ejemplo, el enlace a un perfil de LinkedIn o GitHub, en el área de Tecnologías de la Información, es una información potencialmente diferenciadora, que ayuda a los reclutadores a entender en qué plataformas y canales estamos presentes (y a desarrollar cierta actividad).
Hoy en día, la dirección completa ya no es una información necesaria que deba incluirse en el CV. Es importante mencionar en el CV las ubicaciones en las que estamos disponibles para trabajar y/o el régimen de trabajo(totalmente remoto, híbrido y totalmente de oficina) que estamos dispuestos a adoptar.
5. Enumerar las competencias técnicas y sociales
En el mercado de las TI, es muy importante presentar cuáles son nuestras principales competencias técnicas y sociales. Esta sección de nuestro CV nos brinda la oportunidad de mencionar las principales tecnologías con las que hemos estado en contacto a lo largo de nuestra carrera.
Para enumerar nuestras competencias de forma eficaz, debemos: 1) centrarnos en las palabras clave, utilizando viñetas o tablas; 2) Enumerar tantas competencias tecnológicas como hayamos adquirido; 3) ser minucioso, y sobre todo honesto, al describir las competencias que hemos adquirido hasta ahora, incluyendo únicamente las herramientas que dominamos y con las que somos capaces de participar en un proyecto determinado y aportar valor añadido a una empresa determinada.
6. Incluir formación académica y otras certificaciones
Para los profesionales de las TI, la trayectoria académica tecnológica puede haber comenzado en la educación secundaria, en una institución de educación superior (colegio o politécnico) o incluso a través de otros programas, cursos y formaciones.
Organizar esta información de forma sucinta y directa es lo ideal, y siempre es pertinente poner el área de estudio, las fechas de inicio y finalización y la institución o plataforma donde se realizó la formación. Si se ha realizado alguna certificación técnica, también es importante mencionarlo en esta sección.
7. Detallar la experiencia profesional
Esta es quizá la sección más importante de un CV de TI. La descripción de cada una de nuestras experiencias profesionales es esencial, y debe incluir información como: pila tecnológica que utilizamos en cada proyecto, principales responsabilidades y tareas realizadas, logros y éxitos, aprendizajes elementales que sacamos de la experiencia, datos cuantitativos sobre nuestra contribución al proyecto o aspectos cualitativos sobre nuestro impacto en cada equipo.
Es esencial asegurarse de que las fechas y periodos de nuestras prácticas son correctos. Aún más importante es asegurarse de que la información de su CV coincide con la que tiene en otros canales de comunicación, como su perfil de LinkedIn.
Regla adicional: dar un mejor contexto sobre quiénes somos
Tras la información más relevante sobre nuestra trayectoria profesional y académica, podemos incluir en el CV otros apartados que generen impacto. Lo son:
1. Conocimientos lingüísticos: el mercado tecnológico es global, y los idiomas que dominamos (orales y escritos) son una información importante que debemos incluir en nuestro CV. Incluso pueden ser un factor de desbloqueo a la hora de incorporarse a un nuevo proyecto, en una empresa internacional, un equipo multicultural u otro contexto similar. En este campo, es importante ser honesto y estar preparado para «demostrar» nuestros conocimientos en una entrevista.
2. Otra experiencia profesional: proyectos realizados a tiempo parcial, contribuciones a comunidades tecnológicas o proyectos independientes pueden y deben mencionarse en el CV. Siempre que fueran aprendizajes relevantes y relacionados con los nuevos retos que queremos asumir.
3. Experiencias de voluntariado, aficiones y similares – conocer a la persona que hay detrás del profesional también puede ser un factor diferenciador, por lo que podemos aprovechar para incluir en nuestro CV actividades/aficiones a las que dediquemos nuestro tiempo libre o por las que tengamos interés.
Notas finales a tener en cuenta
Crear un CV con impacto en el mercado de las TI puede ser crucial a la hora de obtener nuevas oportunidades profesionales y dar saltos en la carrera.
Más que un soporte físico/digital para compartir con posibles empleadores, un CV es una demostración de nuestra marca personal, presencia e influencia en el mercado laboral. Y así debe verse.
Dicho esto, ponte manos a la obra y construye un CV tecnológico que llame la atención de cualquier reclutador. 😉
João Maria Costa
Consultor de adquisición de talentos
Optimista, optimista y orgulloso alentejano de corazón, cuando no estoy ocupado buscando los mejores talentos para las oportunidades nacionales e internacionales de Neotalent, lo más probable es que esté inmerso en un videojuego, leyendo un buen libro de fantasía o deleitándome con las últimas películas del Universo Marvel.